Hija de Eithinoha, que es la Madre Tierra.
Onatah es algo propensa a los secuestros. Arrebatada por los espíritus del Inframundo, tiene que ser rescatada por el Sol para que las cosechas puedan crecer. No importa las precauciones que se tomen, cada invierno los habitantes del Inframundo consiguen secuestrarla y ya no crece nada.
El Sol tarda meses en localizarla y rescatarla, porque duerme mucho en invierno y tiene que conservar y acumular su calor para abrir la tierra en el lugar justo y en el momento vital. No hay margen de error en la operación de rescate. Siempre se aceptan ofrendas para esta noble causa.
Género: femenino