Bastet es simplemente el nombre bastardo de Bast. Un buen número de deidades egipcias tienen duplicados enciclopédicos fantasmales, así que pensamos en destacar uno a modo de explicación.
Todo tiene que ver con la confusión jeroglífica y la contaminación alfabética. A medida que la lengua egipcia cambiaba, debido en parte a la influencia extranjera, algunos sonidos de las letras corrían el riesgo de perder su pronunciación. En términos sencillos, esto significaba que la gente empezó a pronunciar un nombre como Bast con una T muda.
Para preservar la pronunciación original, los escribas emprendieron una acción de retaguardia clavando letras adicionales al final de las palabras. BAST se convirtió de repente en BASTT. Por suerte, la gente captó la indirecta, ya que de lo contrario podríamos haber acabado con BASTTTTTTTT.
Los dioses suelen ser muy quisquillosos con sus nombres. Sólo recuerda que sólo hay una Bast, también conocida como Bastet. La ET extra al final es o debería ser muda.
Género: femenino