¿Afortunado? Parece que sí. Vive en una cueva en el nacimiento del Nilo y está a cargo de las obras hidráulicas.
Se preocupa especialmente de las inundaciones anuales del Nilo, tan importantes para el ecosistema local y su fertilidad.
Tiene algo de sobrepeso, pero no parece interferir en su vida sexual. Sus grandes pechos colgantes tampoco son un problema. Sólo podemos suponer que su harén de Diosas Rana disfruta de ese tipo de cosas.
Género: masculino