Ella teje los hilos de la vida. Si se le molesta, amenaza con deshacer el tejido del universo. Algunas partes del mismo ya parecen un poco raídas.
Banebdjetet le pidió que arbitrara en la lucha por el poder entre Horus y Set. Gracias a ella, Horus obtuvo la supremacía y Set recibió dos diosas compensatorias, Anat y Astarté.
Cuando se pone de mal humor, se convierte en la diosa de la guerra Anuket.
Género: femenino