Se trata de un sol que brilla en el cielo en su carro de alas doradas. Desde allí arriba ve todo lo que ocurre y a menudo se le pide que arroje luz sobre los acontecimientos.
Hijo de Hiperión y Thea, tiene un número francamente asombroso de hijos. Dando la vuelta a la tortilla y siguiendo al sol desde detrás de una nube nos hemos asomado a su vida amorosa y parece que va a por todas con sol.
Con su esposa Perséfone tuvo cuatro Eetes de los Argonautas, y un pequeño Perses y Pasífae y Circe. Luego hubo un enlace con Rhodos, una de las Ninfas, que dio a luz a siete hijos y a la hija Electryone.
¿Se detiene ahí? En absoluto, es el padre de Aqueronte por Gea, hay un romance con la Oceánida Climeno que resulta en otras siete hijas llamadas las Helíades y su malogrado hijo Faetón. Luego se acercó a alguien llamado Neaera. Tan cerca que dos hijas, Faetusa y Lampetia, llegaron justo a tiempo para cuidar sus rebaños de ganado sagrado.
Entonces se enamoró de Leocothea, pero su hermana Clytie, que ya había disfrutado de los favores de Helios, estaba celosa y se lo contó a su padre, el rey Orcharios de Babilonia, que condenó a Leocothea a ser enterrada viva. Helios llegó demasiado tarde para restaurarla y la convirtió en un arbusto. Con remordimientos, Clytie se expuso a la naturaleza hasta que se desvaneció, mirando todo el tiempo a Helios que surcaba los cielos. Al final se transformó en un heliotropo, que como debes saber es un girasol.
Lo vemos por última vez persiguiendo a Anaxibia, otra de las Ninfas, que parece haberle eludido hasta ahora. ¡Uf!
Género: masculino