Son jóvenes demonios y fantasmas. Revolotean en el aire y son más o menos invisibles. Hay dos maneras de evitarlos si sabes que están cerca. Túmbate, porque no pueden asentarse, o mantén un poco de cúrcuma ardiendo en un cuenco o cocina con ella. Funciona como el ajo en los vampiros.
¿Por qué tomarse tantas molestias? Parecen inofensivos. No, no lo son, pueden soltar veneno y peste en tus oídos.
Ahora, nosotros en Godchecker podemos sugerir una tercera forma. Usar tapones para los oídos.
Género: masculino