Tenía dos esposas, pero cuando salía para supuestamente ir a ganarse un bocado por la mañana, se desprendía de su piel de serpiente y se convertía en un apuesto galán que seducía a otras mujeres con su diabólico encanto.
Cuando sus esposas se dieron cuenta de sus engaños, quemaron su piel de serpiente, por lo que no pudo volver a la prima de los retorcimientos serpentiformes y tuvo que seguir siendo humano para siempre. Entonces inventó la muerte para los humanos y así poder deshacerse de las viejas amigas, porque al fin y al cabo era un demonio, y lo suyo era no hacer nada bueno.
Lo que hace ahora por el sexo no lo podemos decir.
Género: masculino