Tuvo un origen extraño, al nacer mágicamente de una gran mancha antiestética en una tortuga, llamada Dabage. Y su nacimiento surrealista parece haber afectado a su personalidad, ya que creció como una araña joven y bulliciosa, llena de trucos.
Su primera hazaña fue trepar por todo el cielo hasta llegar a lo más alto. (¿Por qué? Sólo por curiosidad, en realidad.) Una vez allí, pasó por la casa del señor Trueno y su esposa Rayo, y finalmente llegó a la puerta de la Antigua Araña de la Creación Areop-Enap.
Areop-Enap sabía exactamente qué arácnido inteligente era el chico, y decidió enviarlo a hacer un recado. Es casi la hora de la cena. Corre y tráeme un poco de fuego para cocinar el pescado.
Así que Areop-It-Eonin fue a buscar un poco de fuego, sin molestarse en preguntarse de dónde sacaba el viejo arácnido sus provisiones de pescado allá en el cielo. Quizás eran peces voladores.
El señor Trueno estaba dormitando entre tormentas cuando llamaron a la puerta. La Sra. Rayo se asomó y vio a una joven y educada araña de pie. Hola, dijo, soy su nuevo vecino. Acabo de mudarme, ¿puedo tomar prestada una taza de fuego?
La señora Lightning cogió un gran trozo de leña y le dio una generosa cucharada, pero le advirtió que se la llevara en silencio. Si mi marido se despierta, se enfadará mucho y me pegará. Pero Areop-It-Eonin estaba tan emocionado de estar agarrando una muestra de fuego que bailó y cantó y dio varias palmadas de alegría.
Por supuesto, toda esta conmoción despertó al Sr. Trueno. Rugiendo de disgusto, se lanzó tras la arañita, con la intención de aplastarla. Pero Areop-It-Eonin se arremolinó, agitando el fuego cada vez más rápido... hasta que ¡pum! El señor Trueno chocó con la madera ardiendo y se desplomó en el suelo agonizando.
Así que la joven araña regresó corriendo con el preciado fuego hasta el viejo Areop-Enap, que se alegró tanto que invitó al descarado joven a una cena de pescado y le permitió vivir en el cielo para siempre.
Suponemos que en el camino derramó algunas gotas del preciado fuego que cayeron a la Tierra. También sospechamos que el herido Sr. Trueno ha permanecido de mal humor hasta el día de hoy.
Género: masculino