La primera mujer, era salvaje y peluda y vivía en la cima de una montaña en la isla de Lembata alimentándose de lagartos y serpientes. Tenía el divertido truco de crear fuego golpeando su trasero sobre una piedra. Esto le permitía deleitarse con la sofisticación de los reptiles asados, a la parrilla o a la brasa.
Wata Rian, un hombre curioso, se dio cuenta de que había humo a la deriva y se preguntó qué podría causar tal cosa, ya que la pirotecnia aún no había hecho su aparición en el mundo. Salió con su perro, un pez que había pescado y algo de vino y se escondió en un árbol observando a Bota Ili cazando.
A su regreso, ella sintió su presencia, gritó y aulló, y amenazó con morderle en pedazos. Hasta que él le indicó que si lo hacía su perro le haría lo mismo. Se llegó a un acuerdo con la ayuda del vino, y en poco tiempo se inició una relación mientras compartían una cena de pescado a la parrilla.
No acostumbrada a tales cenas, Bota Ili se quedó dormida y Wata aprovechó la ocasión para afeitarle todo el vello y quedó al descubierto una mujer muy atractiva. Wata quedó tan impresionado que se planchó el traje aunque no lo tuviera, y se casó con ella. Desde entonces, siempre se han sentido atraídos el uno por el otro, y el mundo se ha beneficiado con las llamas y la pasión.
Género: femenino